La semana pasada acabé bien, recuperando sensaciones, no puedo decir lo mismo de mi isquio drcho (ya esta bien!!!) Pero no me puedo quejar.
La semana acabó con un 2º paseo por Izazpi, esta vez directamente a la cruz vieja (tenía algo pendiente por allí, jajajaj) y una agradable jornada de domingo por las 7 puntas & Irimo, ascendiendo por Nevera hasta Trekutz. Digo agradable por la compañía. Esta vez se unía a mi y a Ainara el carismático Inaxio (experimentado montañero, gran conocedor de Picos). Y como no podía ser de otra forma, el trayecto se hizo muy ameno. La siguiente a Izarraitz. En la foto Inaxio y Ainara con la panorámica desde Irimo.
Pero lo gordo estaba previsto para esta semana (de hecho a esta hora estaba prevista la hora de llegada). Digo estaba, porque nos volvimos ayer (miercoles 21).
Me explico. El plan era el siguiente. Madrugar para poder hacer el "Canal del Palomo" en la Sierra de Guara (vía ferrata) y según horario y climatología completar el día por la zona. Nos alojaríamos en el nuevo refugio de Riglos, y al día siguiente (o sea, hoy jueves) en compañía de un guía hacer el barranco "Boca del Infierno".
Bueno pues con un montón de dudas en el cuerpo, me reúno con Ion, gabinete de crisis!!! Hay que decidir que hacemos. Alerta de fuertes lluvias con 60 l en una hora en la zona. Por lo que meterse en el canal resulta poco menos que un suicidio. Pero claro, aquella zona es milagrosa. Pueden dar malo que hace sol y 30ºC. Finalmente decidimos continuar con el plan. Y milagro, llegamos y no llueve. Pero solo hace 28 grados...el resto en KRONIKAS 2.0. YA DISPONIBLE...(foto con mi amigo y hermano, antes de comenzar la aproximación)
Que ha pasado. Que casi nunca llueve por aquella zona. Y el martes noche cae una tormentón de la leche justo en el nacimiento del barranco. Sube el nivel una barbaridad, es impracticable. De todo esto nos enteramos ayer a la hora de comer.
Hace mucho calor, pero mucho eh!!! Asi que abortamos el plan de la 2ª ferrata, las 2 son muy expuestas al sol y la roca tiene que fundir dedos según se acerquen.
Lo que apetece es meterse al agua. Y si puede ser con bien de adrenalina en vena. Pocos sitios mejores que el Gállego.
Pues nada, rafting al canto. Tiempo justo para comer y con el bocadillo en la faringe (muy rica el txorizo con tortilla...jajja) nos enfundamos esos neoprenos que tan bien nos quedan.
Estamos atacados, pero no por el rafting, si no por con quien bajaremos...ya que hay mucha familia por la zona, y juntarnos con papis, mamis y sus crias no es nuestro ideal.
Finalmente tenemos suerte, aparecen por ahi 4 tipos duros con perillas, patillas y demás(que forman un grupo de música). Rezamos para que nos pongan con ellos...y asi es. Tras un par de saltos para tomar contacto con el agua y las pertinentes explicaciones de Santi nos subimos al Raft. Garmen y yo, mano a mano al frente de la embarcación. Y antes de empezar a practicar, le digo a Santi: "oye Santi, a ver si te lo curras!!!"
Y al minuto ya habiamos volcado. Que bien!!! Toca subirse al raft, jeje, aqui ayuda el hacer dominadas. Subo sin problemas, y animo a Garmen...que este año está hecho un toro y sube el solito.
Creo que volcamos otras 2 o 3 veces, 1 de ellas al intentar grindar una roca grande. La mayoría de los remeros se queda debajo de la balsa, a mi me pega Garmen y me tira afuera. Me quedo el último y la corriente me lleva contra las piedras, pero oye, ni nervios ni nada...posición de seguridad y a disfrutar.
Alcanzo el raft aplicando mis conocimientos en rios y corrientes (puta folla) pillo la corriente buena y sin apenas nadar adelanto a los otros.
Buenos momentos al surfear las olas, en las que pegamos un trago majo y se nos inundó la balsa hasta desbordar...
Muy guapo también el rápido en el que nos dejan tirarnos "a pelo". Lo repetimos tras hacer la lagartija para remontar el rio por las piedras.
Y tras pasar el famoso embudo y demás rápidos (2 de ellos comandando entre Garmen y yo la balsa) pedimos que llueva. Y vaya si llueve, suerte que ya faltaba poco. Porque ahí todo empapados y con una bara de metal en las manos...mal rollito ¿no?.
Tras sacar la balsa nos pegamos un baño en el rio. Y antes de ducharnos nos dicen que se esperan tormentas de 100l /h asi que el plan de los barrancos se queda para otra vez.
Decidimos regresar. Pero de camino visitamos el Castillo de Javier. Aqui un par de fotos que dan fé de ello:
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